sábado, 29 de marzo de 2025

CUANDO UNA MUJER SUBE LA ESCALERA (1960), DE MIKIO NARUSE.

Keiko es una mujer independiente que paga un alto precio por serlo. Trabaja en el mundo de la noche japonesa, en un club al que acuden hombres adinerados para pasar un buen rato en compañía de chicas adiestradas para ser agradables con unos clientes que siempre vuelven. Aunque su empleo es de encargada, en la práctica su función también es hacer que los clientes se sientan a gusto. Es más, su carácter dulce, conservador y difícil a la vez resulta muy atrayente los visitantes de su bar nocturno, llegándose al punto de que alguno llega a proponerle matrimonio. Aunque las noches transcurran llenas de cortesía japonesa, Keiko no se hace ilusiones: vive en un mundo sórdido y siempre al borde del desastre económico, puesto que su escaso sueldo está destinado a vestimentas y maquillaje elegante. Cada vez que sube la escalera del bar para empezar a trabajar siente una gran vergüenza, pero sigue adelante con tal de no fracasar y tener que volver a casa de su madre. Naruse narra las circunstancias de su protagonista con gran sensibilidad y ofrece un retrato muy ajustado de todos los personajes que la rodean. Para Keiko su existencia es un gran teatro en el que tiene que actuar cada noche para dar una imagen de mujer liberada y a la vez virtuosa. Debe vestirse y perfumarse, sonreir a todos y beber con sus clientes para mantener una noche más su humilde nivel de vida. Un retrato impecable de un submundo japonés que sorprenderá al espectador occidental.

P: 9

1 comentario:

  1. Oh tempora o mores, impertérrito, incandescente, indeleble, un afortunado Sísifo, Miguel, al pie del cañón eternamente, un premio nobel a tus ojos por tantas horas de entrega visionaria y guiños al blog cultural de ensueño. Un fuerte abrazo, Pepe Guerrero

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