sábado, 27 de mayo de 2023

HOLY SPIDER (2022), DE ALI ABBASI.

Basándose en hechos reales acerca de la actuación de un asesino en serie llamado Saeed Hanaei, Holy Spider nos traslada la ciudad sagrada iraní de Hashhad a principios de este siglo. Allí asistimos a la actividad criminal de Hanaei, un ejemplar padre de familia de día y un despiadado asesino de prostitutas de noche. Solo que el criminal está convencido de estar ejecutando una misión divina que consiste en limpiar de mujeres impuras la ciudad en la que vive. La policía no parece muy interesada en investigar el caso, al hilo de la escasa alarma social que suscita la muerte de mujeres que viven al margen de la sociedad. Solo una periodista, Arezoo, se tomará en serio el asunto y será la que obligue a las fuerzas del orden a tomar cartas en el asunto. Arezoo es un personaje muy interesante, una mujer libre - todo lo libre que se puede ser en el Irán actual - que no desea relación amorosa con ningún hombre y que vive constantemente rozando el filo de lo que está permitido en su país a una mujer. Irán aparece retratado como lo que es: una nación cuyo machismo absoluto está estimulado por una visión radical del Islam que impregna todos los aspectos de la existencia. Lo más perturbador es que, cuando el asesino es finalmente capturado después de haber provocado numerosas muertes (no era difícil hacerlo si la policía ponía un poco de voluntad), comienza un movimiento popular de apoyo a Hanaei, presentándolo como un héroe social que solo ha llegado un poco más lejos de lo que se atrevería el ciudadano común en su lucha por una comunidad más pura. Incluso para su hijo Hanaei es un modelo a imitar, tanto que acaba representando las actividades nocturnas de su padre cuando juega con su hermana. Holy Spider es una película que expone sin concesiones el drama de vivir en una sociedad dominada por el fanatismo religioso y las consecuencias sociales del lavado de cerebro colectivo que supone tal circunstancia.

P: 8

EL MUNDO NUNCA ES SUFICIENTE (1999), DE MICHAEL APTED.

A pesar de la frescura que Pierce Brosnan había aportado al personaje de James Bond en las dos primeras entregas que protagonizó, en esta película la fórmula da signos de agotamiento. Se trata de una aventura totalmente convencional, que no aporta gran cosa al resto de la saga, puesto que no es innovadora en ninguno de sus aspectos y se limita a narrar de manera correcta, aunque aburriendo en ocasiones, la enésima crisis que debe resolver el agente. El mundo nunca es suficiente está bien planteada, con un villano como Renard al que podía habersele sacado munco más partido, pero no juega bien sus cartas y ni siquiera su director es capaz de continuar con la senda que se había iniciado en la entrega anterior de otorgar una cierta profundidad psicológica, derivada de su pasado, al protagonista, un factor que sería uno de los grandes aciertos de la era Craig. Lo mejor de la película son sus minutos más sobrios: el comienzo en Bilbao, donde Bond visita la oficina de unos banqueros, una escena tensa y realista que luego se ve lastrada por el espectáculo cada vez más inocuo que propone un guion que debería haber sido mucho más pulido antes de mostrarse en pantalla.

P: 5

viernes, 26 de mayo de 2023

COMO UN TORRENTE (1958), DE VICENTE MINNELLI.

Minnelli rodó Como un torrente en un momento personal amargo, cuando acababa de experimentar su segundo divorcio en pocos años, un sentimiento que se trasluce en una película que no hace demasiadas concesiones con la moral de sus personajes. Dave Hirsh (un magnífico Frank Sinatra), el protagonista, regresa a su pequeño pueblo de la América profunda después de pasar muchos años fuera ganándose la vida en el Ejército. Hirsh es un es un escritor de talento que no ha tenido mucho éxito, pero sobre todo es un hombre amargado de vuelta de todo. Sus principales reservas de rencor están centradas en su hermano mayor, que lo abandonó en un orfanato cuando murieron sus padres. El pueblo en el que transcurre la acción es casi otro personaje, un lugar absolutamente clasista dividido entre la gente bien y el resto. Dave simpatiza enseguida con otro ser de moral parecida, un jugador de cartas que se está autodestruyendo con su adicción al alcohol - un vicio muy extendido en el pueblo - y poco a poco va apreciando, frente a la hipocresía que lo rodea, al único ser que parece apreciarlo de verdad, una prostituta que ha viajado con él desde Chicago y parece haberse enamorado del auténtico Hirsh. Una película muy al margen de la moral tradicional del Hollywood de la época repleta de personajes ambiguos que luchan subterráneamente por sus propios intereses, donde el único ser puro es esa prostituta a la que todos desprecian.

P: 8

lunes, 22 de mayo de 2023

BENEDETTA (2021), DE PAUL VERHOEVEN.

La figura histórica de la monja Benedetta Carlini, un controvertido personaje que vivió en el siglo XVII en un convento de Pescia interesó con toda lógica a un director tan amante de lo morboso como Paul Verhoeven. Benedetta es un libre recreación de la existencia de una monja lesbiana que consiguió durante un tiempo hacerse con el control de su convento y empezar a propagar las visiones que decía experimentar y a exhibir una serie de estigmas. El director de Elle aprovecha en primer lugar para rodar un film con una ambientación muy adecuada que pronto deriva en una historia de amor erótico de la protagonista con una joven novicia, aprovechando todo esto para insertar las visiones peculiarmente teológica que dice experimentar Benedetta. En el cóctel muy servido, también tenemos oportunidad de contemplar cómo se negociaba la entrada de una novicia noble en un convento - temas de dinero y dote - y el impacto de una peste negra que diezmaba ciudades en aquella época. Para algunos el estilo de Verhoeven puede resultar excesivo, pero es indudable que el director ya octagenario sigue siendo fiel a sí mismo y vuelve a firmar una película inteligentemente provocadora. Ni siquiera se puede decir que se posicione en contra de la religión católica en una obra que está interesada sobre todo en husmear en la misteriosa existencia de un personaje muy particular que algunos pueden interpretar como una predecesora del feminismo.

P: 7

sábado, 13 de mayo de 2023

EL HOMBRE DE LA CÁMARA (1929), DE DZIGA VERTOV.

A la vez que intenta ser innovadora, explorar nuevos caminos en el joven medio cinematográfico, El hombre de la cámara es un evocador viaje al pasado, a un San Petesburgo donde ya se ha asentado el Estado comunista, ese que quería crear un hombre, que en aquella época todavía contemplaban con ilusión millones de personas dentro y fuera de la Unión Soviética. Vertov quiere crear una película sin guion, sin personajes y sin trama, apostándolo todo al montaje, consiguiendo así una obra hipnótica e irrepetible, un experimento formal que sigue fascinando a los espectadores del presente. El cineasta no se conforma con un documental sobre la vida cotidiana en la ciudad y frecuentemente altera las imágenes, crea efectos especiales con ellas, parte en dos la pantalla, creando así un ritmo tan frenético y a la vez tan adecuado como el tránsito de vehículos por una autopista. Es curioso que en todo momento Vertov muestra ciudadanos felices, atareados en sus quehaceres o disfrutando de momentos de ocio, por lo que la película - eso sí, de un modo muy secundario - tiene también un tono propagandista, muy en consonancia con el carácter del nuevo Estado socialista, mostrándose también la presencia espiritual constante de personajes sagrados de la causa como Gorki o el mismo Lenin. No puede uno evitar pensar que tan solo una década después, esta bulliciosa ciudad iba a ser atacada de la forma más cruel posible y posiblemente muchos de los hombres y mujeres que aparecen en la cinta serían víctimas de tal brutalidad. Pero esa es otra historia. El hombre de la cámara es una película optimista, que sigue siendo muy moderna a día de hoy, puesto que está dotada de un lenguaje visual atemporal.

P: 10 

NANA (2022), DE KAMILA ANDINI.

La protagonista vive una existencia acomodada en la Indonesia de los años setenta del pasado siglo, pero ya en la secuencia inicial hemos visto que tiene un pasado turbulento, que tuvo que huir y perdió a su primer marido en el conflicto de Java Occidental, unos años antes. Ahora Nana se ha convertido en una señora muy respetada, pero a la que siguen asaltando los fantasmas de su pasado. Su marido, un hombre muy rico, disfruta de su amante prácticamente delante de sus narices, pero, y esto es lo curioso de la película, la protagonista acabará haciéndose íntima amiga de esta amante, consiguiendo con ella un acercamiento emocional que jamás podría disfrutar con su frio marido. Y es que, en general, las relaciones entre personajes en Nana destilan frialdad, supongo que como reflejo del carácter de la sociedad indonesia. Aunque no carece de interés como reflejo de una cultura y una época mostradas con detalle al espectador, la película de Andini resulta demasiado contenida, demasiado lenta y eso al final hace mella en su resultado final, que podía haber sido bastante más redondo.

P: 5 

martes, 9 de mayo de 2023

ADIÓS, MUÑECA (1940), DE RAYMOND CHANDLER Y DE DICK RICHARDS (1975). UN HOMBRE SOLITARIO.

El detective privado Philip Marlowe es un hombre solitario. Está en constante conversación con sus semejantes, casi siempre por cuestiones profesionales, e incluso cuenta con algunos amigos, algunos policías, pero en el fondo se basta a sí mismo para sostener su cínica visión del mundo. Marlowe sobrevive en un mundo complejo repleto de gente de moral ambigua que, como él, mira en primer lugar por sus propios intereses. Quizá por eso se interese por ese gigantón Moose Malloy, porque, a pesar de su bestialidad y su falta de escrúpulos ante el asesinato, su objetivo es recuperar lo que él considera su amor perdido. Como no puede ser de otra manera, lo que al principio parece un caso sencillo se va complicando en una maraña de intereses que implica a las altas esferas, aunque seguir la trama de Adiós, muñeca es bastante más asequible que la de El sueño eterno.

Como puede deducirse de esta reflexión que tiene consigo mismo en el peor momento de la trama para sus intereses, Marlowe es un luchador y no se detiene siquiera cuando hay asesinos dispuestos a acabar con él:

"—De acuerdo, Marlowe —dije entre dientes—. Eres un tipo duro. Un metro ochenta de acero templado. Ochenta kilos en cueros y con la cara lavada. Buenos músculos y buen fajador. Puedes salir adelante. Te han dado dos veces con una cachiporra, casi te estrangulan y te han hecho papilla la mandíbula con la culata de un revólver. Te han inyectado opio hasta las cejas y te han mantenido la dosis hasta volverte tan loco como un rebaño de cabras. ¿Y a qué se reduce todo eso? Al pan nuestro de cada día. Vamos a ver si eres capaz de hacer algo realmente difícil, como ponerte los pantalones."

La adaptación de Dick Richards, muy fiel a la novela original y capaz de simplificar algunos nudos del argumento, presenta a un detective ya muy maduro, un magistral Robert Mitchum que se queja nada más aparecer en pantalla de lo viejo que se está volviendo para ese trabajo (el actor tenía 57 años cuando la rodó). La ambientación respeta a los clásicos del cine negro, pero el director también aprovecha el ambiente cínico del Hollywood del momento, que estaba reiventando todos los géneros, para poner su granito de arena al respecto. A destacar escenas tan impresionantes y que definen estupendamente al personaje como la del interrogatorio de la madame de un burdel, que interroga a Marlowe asestándole varios guantazos, consiguiendo que el protagonista responda con un contundente puñetazo en el rostro de la mujer, a pesar de poner su vida en peligro con esa acción. Ese es Marlowe, alguien muy paciente y metódico en su trabajo, pero que también tiene sus límites.

P: 7

domingo, 7 de mayo de 2023

EL BOSQUE (2004), DE M. NIGHT SHYAMALAN.

Después de sus memorables tres primeras películas, Shyamalan armó su próxima historia en un escenario único y pequeño, una aldea del siglo XIX sometida a unas reglas muy estrictas de convivencia debido a un peligro indeterminado que acecha en el bosque circundante. Como es costumbre, el director de Señales, va dosificando la información al espectador, para que pueda disfrutar de la sorpresa final, la cual es difícil ver venir. El bosque funciona muy bien como retrato del momento histórico que en aquel momento estaban viviendo los Estados Unidos. Después de los atentados del 11 de septiembre, la disyuntiba entre seguridad y libertad era objeto de intensos debates. En esta historia el individuo debe elegir si traiciona a su comunidad internándose en lo desconocido, algo que puede matarle, pero también otorgarle conocimiento y libertad, elementos que se echan a faltar en la monótona existencia a la que están sometidos los habitantes de la aldea. Al final todo deriva en una especie de manual de instrucciones de cómo superar el miedo, ese gran condicionador de la especie humana. El bosque puede gustar más o menos, pero es indudable que detrás de la cámara (y delante, por unos instantes) hay un director que impone su personalidad a la historia que quiere contar y no tiene miedo de las varipintas reacciones que va a generar en el público una historia como ésta. Solo por eso, ya merece la pena acercarse a ella.

P: 7

sábado, 6 de mayo de 2023

EL SALARIO DEL CRIMEN (1964), DE JULIO BUCHS.

Una joya bastante desconocida del cine español que no desmerece en ningún aspecto de los clásicos de cine negro americano. Aunque al principio parece que el argumento gira acerca de la venganza del detective de la policía Mario por la muerte de un compañero en una operación, la trama pronto encuentra a su mujer fatal que va a llevar al protagonista por el mal camino. La motivación del personaje al que interpreta Arturo Fernández es curiosa y muy propia de la época: gana mucho menos dinero que su amante y quiere ser él el que mantenga el nivel de vida al que ella está acostumbrada. Hay que romper también una lanza por un guion que, con una trama sencilla, sabe mantener el interés del espectador en todo momento además de introducir adecuados giros en los momentos precisos. A destacar la presencia de actores de la talla de José Bódalo y Manuel Alexandre, este último en el papel de compañero de fatigas del protagonista, un policía con cara de buena persona al que nadie identifica con tan arriesgado trabajo.

P: 8