sábado, 13 de abril de 2024

LA VIDA DE NADIE (2002), DE EDUARD CORTÉS.

Adaptación libre del magnífico libro El adversario, de Emmanuel Carrère, La vida de nadie cuenta la historia de Emilio Barrera, un esposo y padre de familia modelo que basa su existencia en una gran mentira. Aunque dice trabajar en un importante puesto para el Banco de España, en realidad pasa sus jornadas deambulando por la calle y sentado en un banco (éste sí real), mientras deja que transcurran las horas. Su forma de vida desahogada en lo económico la consigue gracias al dinero que le dan amigos y familiares - dinero negro casi siempre - para que lo invierta en unos negocios muy rentables que él conoce por la información privilegiada obtenida de su presunto trabajo. Lo más llamativo de todo es que Emilio parece estar contento con su situación, aun sabiendo que en cualquier momento se le puede desmoronar el castillo de naipes que ha ido construyendo con tanta paciencia y dedicación. Como maestro de la mentira que es, sabe como afrontar cada situación peligrosa y seguir con su peligrosa huida hacia delante para ir ganando días o semanas continuando su forma de vida. El gran secreto de Emilio es su porte físico: siempre impecablemente vestido y con una actitud humilde que gana a cualquiera en las distancias cortas, nadie podría sospechar siquiera que todo lo de este hombre es una gran mentira. El desmoronamiento anunciado se acelerará cuando el protagonista conozca a Rosana, una joven estudiante de sociología, con la que vivirá unos días de felicidad antes del desastre final. Una película muy bien rodada por Cortés, repleta de detalles interesantes, como el fugaz encuentro de Emilio con un ser muy parecido a él o el retrato que realiza de esa vida burguesa muchas veces fundamentada en la nada más absoluta.

P: 7

UN AMOR (2023), DE ISABEL COIXET.

Adaptación muy fiel de la novela homónima de Sara Mesa, Un amor cuenta la historia de una mujer herida que quiere alejarse de todo alquilando una casa destartalada en un pueblo remoto. La principal característica de Nat, al menos en principio, es su vulnerabilidad. Es una persona con pocos medios económicos y que no es capaz de integrarse en el ecosistema social un tanto hostil que conforman los habitantes del pueblo. Llega hasta el límite de tener que acceder a una especie de forma de prostitución para que le arreglen las goteras que abundan en su tejado. Su único auténtico amigo en el pueblo va a ser el perro Sieso, un ser que parece tan herido como ella. Destaca en la película de Coixet el ambiente creado en el pueblo, una atmósfera opresiva que hace que Nat respire tensión en vez de la tranquilidad que ha venido a buscar. Lo idílico brilla por su ausencia y la vida rural se torna incomprensible para una protagonista que pasa sus días prácticamente encerrada en su habitación concentrada en las traducciones que realiza para malvivir. Ni siquiera el baile final, presuntamente liberador, aleja la sensación de desasosiego que en todo momento embarga al espectador.

P: 6

viernes, 12 de abril de 2024

NI UNA NI GRANDE NI LIBRE (2024), DE NICOLÁS SESMA. LA DICTADURA FRANQUISTA.

A diferencia de lo que sucedió en Alemania o en Italia, el fascismo solo pudo imponerse en España después de una larga Guerra Civil. La dictadura franquista fue tan larga que pasó por fases muy diferentes, dependiendo de la coyuntura internacional de cada momento. Su principal objetivo fue la supervivencia, aunque para ello hubieran de abandonarse los sueños imperiales que inflamaban los primeros discursos de la victoria. Lo que deja claro en todo momento el libro de Nicolás Sesma es que la dictadura no fue cosa de un solo hombre. Para sobrevivir e incluso para prosperar, Franco tuvo que rodearse de gente competente que le ayudara a tomar las decisiones adecuadas en cada momento - algunas de ellas en detrimento de la calidad de vida de las clases más vulnerables - además de contar con una buena dosis de buena suerte que impidió en distintos momentos la intervención internacional en el país.

Se sabe que la Guerra Civil no fue solo una conquista de territorio que quedaba bajo el control de los sublevados, sino una limpieza sistemática de los elementos opuestos al nuevo Régimen, todo ello en la confianza del padrinazgo que ejercían las dictaduras Italiana y Alemana a la Cruzada emprendida en nuestro país. Una política que siguió vigente muchos años después de ganada la guerra:

"(...) el objetivo final de Franco y de la dictadura era asegurarse no solamente la victoria a corto plazo, sino también contra la siguiente generación de militantes de izquierda. En el mismo sentido, preventivo era también su carácter ejemplificador. Ante la más mínima amenaza, la respuesta represiva era completamente desproporcionada, pues de esa manera se conseguía aterrorizar a todo aquel que estuviera pensándose pasar a la clandestinidad y la oposición.

Como buena parte de los regímenes fascistas durante sus primeras fases —en las etapas de radicalización, ocurridas en un contexto de guerra, terminaban cayendo todas las barreras—, la dictadura franquista modulaba su grado de violencia en función de la situación internacional y del cálculo que se planteaba entre la autoafirmación para consumo interno y el coste político de su percepción exterior."

Aunque a base de sufrimientos para la población y bajo el lema de "orden, unidad y aguantar", España sobrevivió al aislamiento internacional derivado de la posguerra y poco a poco, aprovechando la coyuntura favorable de la Guerra Fría, supo presentarse como un aliado imprescindible para la defensa de Occidente por parte de Estados Unidos. Todo esto derivó en una aceptación, aunque a regañadientes en muchos casos, de la dictadura franquista como un actor más en la política internacional y su participación en los planes de estabilización que derivarían en un crecimiento económico sin precedentes en todo Occidente, algo que incrementó notablemente el bienestar de los españoles en los años sesenta, aunque de un modo más modesto que en el resto de Europa.

Los últimos años, los que derivarían en una difícil transición a la democracia, fueron particularmente agitados y complicados, con un retorno momentáneo a las posiciones más feroces de los años cuarenta, pues en la eterna pelea entre inmovilistas y reformistas, los primeros fueron los que acabaron llevándose el gato al agua con el gobierno de Carrero Blanco. El final de todo aquello lo conocemos bien, pero podría perfectamente no haber sido así. Salir de cuarenta años de dictadura, una dictadura que supo adaptarse a todas las coyunturas, solo fue posible porque falleció su principal valedor y sus acólitos no supieron cómo reaccionar, aunque, como bien apunta Sesma, la fortaleza del entramado construido durante tantas décadas fue tal, que llegó a sobrevivir brevemente al dictador, derivando aquello en un mantenimiento de muchas estructuras de poder económico y social durante la democracia.

Como historiador joven, Nicolás Sesma ha escrito una historia renovada del periodo de la dictadura, repleta de detalles reveladores y sin prevenciones ideológicas. Un libro muy ambicioso y que permite conocer de manera muy precisa cómo fue posible que el franquismo sobreviviera tantos años e incluso se permitiera tener sus momentos de gloria coincidiendo con los veinticinco años de la llegada al poder del dictador.
 

15 DÍAS CONTIGO (2005), DE JESÚS PONCE.

Lo mejor de 15 días contigo es que se aleja de los tópicos del cine español y aborda una historia muy dura protagonizada por una mujer que acaba de abandonar la cárcel y carece de recursos y un amigo de toda la vida toxicómano que vive en la calle. La historia es muy sencilla, cuenta el día a día de estos dos seres que viven al margen de la sociedad, pero intentan acercarse a ella a su manera para al menos comer cada día. Su pequeño infierno es circular, con días todos similares, condenados a hacer las mismas cosas para después descansar miserablemente bajo unos soportales. El único error de la película es que intenta ser costumbrista pero al final es muy teatral y algo sensiblera, no llevando su argumento hasta las últimas consecuencias. Está repleta de escenas duras, pero también de otras que atenúan las anteriores. Retrata una España muy dura que no tiene servicios sociales para los que están en la calle y éstos han de recurrir, cuando necesitan una comida caliente o una ducha, a la caridad de las monjas, por lo que la supervivencia de los excluidos solo puede ser posible a través de la picaresca.

P: 5 

domingo, 7 de abril de 2024

ESTRELLA, SEÑAL DE SOCORRO (2002), DE NIKOLAY LEBEDEV.

Para el verano de 1944, cuando transcurre esta película, la Alemania nazi había sufrido numerosas derrotas en el frente ruso y se encontraba en franco retroceso, pero todavía poseía un ejército capaz de organizar furiosos contraataques. De eso trata Estrella, señal de socorro, curiosa producción rusa que cuenta la historia de un pequeño comando del Ejército Rojo que penetra tras las líneas alemanas para indagar acerca de las intenciones de una inminente contraofensiva que están organizando los nazis. La película, de claro cariz nacionalista, nos presenta a unos soldados soviéticos dispuestos a todo por la victoria. Además, el grupo que va a realizar la misión está formado por gente de diversas nacionalidades de la Unión Soviética que se tratan entre ellos como hermanos. Las escenas bélicas intentan ser espectaculares, en la línea de la en aquel tiempo reciente Salvar al soldado Ryan, aunque no se acercan al realismo de la película de Spielberg. Sí que es cierto que Estrella, señal de socorro intenta ir un poco más allá de los tópicos del cine bélico y muestra a todos sus personajes, amigos y enemigos, como seres humanos inmersos en una situación que los supera, puesto que Lebedev no se abstiene de presentar la guerra como lo que realmente es: un lugar dónde se puede ser un héroe y a la vez una inmensa carnicería.

P: 5

sábado, 6 de abril de 2024

EL HOMBRE QUE NUNCA ESTUVO ALLÍ (2001), DE JOEL COEN.

Ed Crane, el protagonista de El hombre que nunca estuvo allí, se nos presenta como una especie de muerto en vida. Aunque toda la película está narrada por su locuaz voz en off, en la vida real se trata de un tipo callado y retraído, aparentemente conforme con su trabajo en una peluquería. Aunque en realidad tiene ambiciones, sobre todo cuando un tipo llegado a su pequeña ciudad le cuenta un plan de negocios y él decide chantajear de forma anónima al amante de su esposa para conseguir el dinero necesario para emprender. Los hermanos Coen son unos maestros en jugar con sus personajes y someterlos a los caprichos del destino, por lo que un tipo tan anodino se hace interesante cuando se le coloca en una situación tentadora. No es este el mejor trabajo de su director. Aunque la fotografía es extraordinaria y muy propia del género negro al que pertenece el film, al final el guion es un tanto largo y pesado y con algún que otro cabo suelto que no se acaba de explicar. Un intento loable de crear una película de este estilo no poblada por criminales o duros detectives, sino por gente corriente que en circunstancias normales hubiera seguido habitando sus vidas intrascendentes. 

P: 6

martes, 2 de abril de 2024

PASSAGES (2023), DE IRA SACHS.

Tomas es director de cine. Durante las primeras secuencias de Passages podemos intuir que se siente a gusto en su puesto de mando durante la realización de su película. Es un tipo seco y severo con sus subordinados, un auténtico narcisista que lleva ese carácter a su relación con Martin, su marido. En la fiesta de fin de rodaje conoce a una joven y se acuesta con ella. Para él dicha relación es un capricho, pero no puede evitar sentirse atraído por Agathe y seguir viéndola, quizá por la novedad de experimentar una relación sexual distinta. Ella se queda embarazada y el protagonista, vértice del trio, intentará manipular a los otros dos miembros involuntarios del mismo para que formen con él una especie de familia organizada a su capricho. La película de Sachs se basa ante todo en el carisma del personaje interpretado por Franz Rogowski, un tipo que es capaz de manipular a cualquiera para que se comporte según sus intereses y que cree que el mundo debe girar a su alrededor como si ese fuera el sino natural de las cosas. Ira Sachs rueda muy bien los ambientes nocturnos en los que se mueven los personajes, pero su película adolece de necesitar un retrato un poco más profundo de los mismos para que el espectador se sienta identificado con ellos.

P: 5